Especialidades: Punción Seca
¿Qué es la punción seca?
La punción seca es una técnica de fisioterapia que consiste en la introducción de una aguja en un punto concreto del cuerpo, sin infiltrar o introducir ninguna sustancia química, con objeto de inducir un efecto analgésico. Por tanto, el beneficio se derivaría del estímulo mecánico aplicado y no de una acción farmacológica.
Dentro de la punción seca, podemos diferenciar 2 técnicas según la profundidad de aplicación:
Superficial: la aguja no se introduce más allá del tejido subcutáneo.
Profunda: la aguja se inserta en la musculatura. También, se conoce por el nombre de estimulación intramuscular.
La técnica de la punción seca puede ser de utilidad en diversos síndromes dolorosos del aparato osteomuscular. No obstante, su uso se ha desarrollado muy especialmente en el tratamiento del síndrome de dolor miofascial, un cuadro doloroso en el que se identifican de manera clara los denominados puntos gatillo.
Estos puntos se distribuyen en torno a un músculo o grupo muscular. Al ejercer presión sobre ellos, se activa o se intensifica el dolor (en ese mismo punto o a distancia) con la particularidad de que no parece mediar una causa inflamatoria.
La introducción de la aguja en el punto gatillo desencadena una reacción nerviosa refleja y la liberación de opioides endógenos. Éstos son unas sustancias producidas por nuestro propio organismo y que tienen potencial analgésico.
Este efecto puede no apreciarse hasta pasado un tiempo, dado que la propia introducción de la aguja produce dolor en sí misma y éste puede prolongarse durante varias horas. Para conseguir los mejores resultados, se sugiere que son necesarias varias sesiones de tratamiento.
El mecanismo de la punción seca es muy similar al atribuido a la acupuntura. Por ello, estas dos técnicas a menudo se confunden.